Grecia era un destino que teníamos en mente desde hacía ya tiempo, y al final este ha sido el verano que hemos podido ir a conocerla. Volvemos encantados, aunque hayamos ido en una época difícil por la crisis económica que asola el país en estos momentos, los turistas no tienen ningún tipo de problema, por lo que animo a la gente que quiera ir a conocerla.
Nuestro plan era conocer alguna de las islas Cicladas y Atenas.
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Itinerario de dos semanas por Grecia:
1. Vuelo BIO - Santorini (directo)
2. Santorini - Milos (Ferry)
3. Milo(s) - Atenas (Ferry)
4. Vuelo ATH - BIO
Como siempre viajamos solo con los vuelos ida y vuelta sacados y las tres primeras noches en Santorini, el resto lo fuimos cogiendo sobre la marcha todo desde allí.
SANTORINI
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Es una de las cicladas más famosas junto con Mykonos. Una isla volcánica con forma de media luna que se originó hace 3.500 años, destaca por las cúpulas azules de las iglesias junto con las casitas blancas que trepan por el borde del acantilado de Oia, Es un placer perderse por el laberinto de calles empedradas y escaleras blancas. Esta isla también famosa por los impresionantes atardeceres que se pueden contemplar desde Oia con espectaculares vista de la caldera.
Es una isla pequeña que con dos o tres días de estancia tienes suficiente si quieres conocer más islas,nosotros con tres noches allí tuvimos suficiente. Alquilando una moto, coche o quat se recorre la isla perfectamente. En grecia en general se conduce fatal, por lo que cuidado, casi todo el mundo conduce sin casco. Nos alojamos en el Hotel Porto Castello, a 2 km del centro de Fira, la verdad que por 30 euros la noche con desayuno estaba muy bien, un hotel familiar alejado de las multitudes con la playa de Exo Gialos a escasos 50 metros y con piscina. Nos vinieron a recoger al aeropuerto a las 4 de la mañana, y cada hora hay una furgoneta del propio hotel que te acerca y recoge a Fira.
No te puedes ir de Santorini sin visitar los núcleos urbanos de Oia y Fira, en los que podrás comprar todo tipo de souveniers, joyas, gastronomia tipica de la zona y poder cenar en cualquier terraza con vistas a la caldera (una de las que más nos gusto, Thalassia, Oia). Dando un paseo entre callejuelas podréis encontrar un sinfín de galerías de arte y artesanía, que son dignas de admirar.
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| Sunset en Fira- Santorini |
Las playas están bien, todas ellas son de piedras, por sus orígenes volcánicos, estuvimos en playas casi desiertas como la de Kamari Beach, muy cerquita del aeropuerto, por lo que me recordaba mucho a la playa d´en Bossa en Ibiza, ya que veías los aviones aterrizar casi en tu toalla.
Red Beach fue la que más nos gusto, la más diferente, aunque muy turística, su acceso es por un caminito escarpado de piedras, pero aun así continuamente esta entrando gente a verla y fotografiarse con su característica pared rojiza.
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| Kamari Beach, playa de rocas |
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| Red Beach, al sur de la isla |
Tanto en Fira como en Oia, hay agencias por todas las esquinas en las que podéis alquilar barcos, helicópteros, excursiones de todo tipo.... Nosotros hicimos una por 18 euros por persona, que duraba una mañana en un barco que te acercaba al volcán Nea Kameni y a Hot Springs (zona en la que poder bañarse en aguas calientes de sulfuro). Muchas de las excursiones incluyen visita a las dos islas que se encuentran en el centro de la Caldera de Santorini y un baño de media hora en las aguas termales de Palea Kameni. También hay tours organizados de un día con visita en minibus a los pueblos de Fira y Oia y luego vistas de a caldera desde un velero, incluso con cena o comida incluida. Una recomendación si decidís hacer una excursión con parada en las aguas termales, llevar ropa oscura no muy nueva, ya que la ropa queda algo sucia por las aguas y también ropa de cambio, para seguir con la excursión.
Desde el pequeño puerto de Athinios salen la mayoría de las excursiones al volcán y aquí podréis ver fondeados los mayores cruceros que llegan a la isla. Para bajar a este puerto de Fira, se puede hacer mediante un funicular (5 euros/pers), a lomos de un burro o bajando a pata la larguísima escalera que conecta el puerto con lo alto de Fira. Decir, que pocos burros vimos, la mayoría eran caballos y bastante hermosos, hicimos 4 veces el recorrido en días distintos, y recomiendo ir con un buen calzado (playeras), ya que las piedras de las escaleras están muy pulidas de tanto transito además de orina y heces de los animales. Personalmente, a nosotros nos pareció curioso y único aquella zona, pero no quisimos montar a lomos de un burrito o caballo, ya que solo sufrir en nuestras carnes lo que costaba subir y bajar aquellas escaleras con toda la solana pegando de frente, solo podíamos imaginar como tendrían que estar aquellos animales. Antes de iniciar el descenso compramos una botella de agua y unas cerezas para amenizar la bajada. ¡OJO! con darles un cachete en el culo al burro o caballo, ni pensarlo, digo esto porque vimos a un guiri darle a un de ellos, y casi le manda directo al agua de una coz. Y es que hay tramos en los que los burros/caballos dificultan el paso, se apilan unos cuantos en medio del camino, y es mejor dejar que ellos mismo se muevan.
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| Los famosos Crazy Donkeys |
Para bajar al puerto de Oia también hay que bajar unas escaleras y os podréis encontrar más crazy donkeys,como allí los llama. Tras conocer Santorini durante tres días, decidimos trasladarnos a conocer la isla de Milos (Melo), a unas 3 horas en ferry (55euros/pers) de Santorini. Los billetes entre islas no son nada baratos, este es uno de los motivos por los que no visitamos más islas. Además de por que esta isla nos enamoro, al venir de Santorini que es una isla muy turística, yo la llamaba la Marbella de hace 15 años, vimos un gran cambio al trasladarnos.
ISLA DE MILOS
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Milos es una isla diferente, era más nuestro rollo, una isla para recorrerla de punta a punta, con mapa o sin el, apareciendo donde el destino ordene.
En un principio teníamos la idea de conocer más islas, pero nos gusto tanto esta isla, que nos quedamos más de lo previsto. Recorrimos toda la isla, descubrimos playas paradisíacas de aguas cristalinas, muchas de ellas vacías, una maravilla toda la playa para nosotros!!
Una isla para todo tipo de turistas, perfecta para ir en familia, pareja o con amigos. Al llegar al puerto de Adamas, nos estaba esperando Dimitri , el dueño del Hotel Agnanti, en el que habiamos reservado la noche anterior una habitacion para tres noches. Un hombre majisimo, que nos traslado al hotel con su propio coche y nos fue haciendo de guía por el camino, indicándonos los sitios de interés, paradas de transporte público,..etc. El hotel esta muy bien situado a 2 km del puerto de Adama y a otros 2 km de Plaka, el pueblo mas cercano. Agnanti es perfecto, los dueños super atentos, el desayuno increíble con mermeladas y yogurt casero y todo tipo de dulces y frutas. Nuestra estancia se alargo otras 4 noches más ya que la isla era preciosa y queríamos disfrutarla mucho más.
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| Agnanti Hotel |
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| Terraza de la habitación |
Una vez instalados, alquilamos una moto y comenzamos a descubrir la isla. Los lugares que más nos gustaron fueron ; playa de Firiplaca, playa de Tsigrado, playa de Tria Pigadia, Klima, Kleftico, playa de Sarakiniko, las viejas minas de sulfuro,...
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| Casitas de Klima |
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| Pueblecito de Klima |
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| Playa Firiplaka |
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| Playa de piedras preciosas- Tria Pigadia |
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| Playa desierta- Tria Pigadia |
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| Cuevas en la playa de Sarakiniko |
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| Playa de Tsigrado |
Un día nos aventuramos a conocer las antiguas minas de sulfuro al Suroeste de la isla, para llegar a ellas hay que atravesar unos 5 km de caminos sin asfaltar, en un paisaje casi lunar con pocas indicaciones o señales para saber si vas bien. Fue divertido, aunque casi nos quedamos sin gasolina a la vuelta, mereció muchísimo la pena llegar hasta allí. Nos encontramos con un panorama idílico, una mina abandonada tal cual la dejaron, podías ver los carriles y carros con los que transportaban el material que extraían de las minas, las casas de los trabajadores.... estaba totalmente abandonado y poca gente llegaba hasta allí, sobre todo porque parece que el camino no lleva hacia ningún sitio. Pero, darse un baño en esa playa desierta y comer un bocata de chorizo con esas vistas fue increíble!!!
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| Old Sulphur Mines |
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| Sarakiniko Beach |
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| Sikia |
Haciendo un huequecito a los placeres del paladar, la gastronomía Griega, me ha sorprendido y mucho. Comida mediterránea, cocina tradicional con gran variedad de sabores. Solo ya con sus ingredientes estrella; el aceite de oliva, las especias y condimentos, las verduras frescas y su variedad de pescados y carnes, te dan ganas de probar un poco de todo al abrir la carta de un restaurante. Al delicioso manjar se le sumaba el entorno (una terraza con vistas, una antigua taberna Griega, una playa desierta,..) que hacia de las comidas y cenas una ecuación perfecta. Hemos comido ensalada Griega a todas horas, entraba genial, con el calor que hacía, era muy refrescante y yo me he aficionado mucho a un dulce típico Griego, las Baklavas, un pastel árabe elaborado con frutos secos, pasta philo y almíbar que no se suelen comer como postre sino como tentempié de entre horas. Las descubrimos en una pastelería de Fira al segundo día de estar allí, y desde entonces íbamos probando Baklabas de todos los lugares que visitábamos. Una delicia con un muchas variantes.
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| Queso Feta caliente con verdura |
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| A la rica Musaka |
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| La famosa Greek Salad- Ensalada Griega |
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| Pulpo a la vinagreta y ensalada Griega |
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| Baklava con pistachos |
Tras pasar casi una semana disfrutando de Milos, cogimos un ferry rumbo al puerto de Pireo-Atenas que duro unas 5 horas.
ATENAS
En Atenas pasamos dos noches en Athens Delta Hotel (parada de metro; Metaxourghio)a dos paradas de metro del centro de la ciudad. Un hotel antiguo, barato y muy bien ubicado, perfecto para pasar dos noches visitando la ciudad.
Atenas es bonito, pero al venir de las islas, que es completamente diferente a la ciudad, notamos mucho cambio, quizás recomendaría primero visitar Atenas dos días y luego trasladarse a conocer las islas. Atenas es un poco caos, la conducción de los griegos es alucinante, nos recordó un poco a Bangkok pero a menor escala. La verdad que el trafico que había lo vivimos como peatones, ya que el transporte público era gratis hasta nueva orden, debido a la crisis y a la medida de que los griegos solo podían sacar del banco 60 euros al día.
Pero por lo demás nos encanto callejear por el casco antiguo de la ciudad, cenar en los diferentes restaurantes con terracitas con vistas a la Acrópolis, maravillosas al atardecer. Sentarnos en las escaleras de la famosa plaza Sintagma tras una jornada de compras por el Mercado de Monastiraki y ver pasar a la gente durante un buen rato, es una ciudad muy turistica, que desborda multiculturalidad. Los principales puntos de interés en Atenas son; la Acrópolis, el Museo de la Acrópolis, la Ágora antigua, la Ágora romana y el Mercado de Monastiraki.
Grecia lo tiene todo, paisajes idílicos, playas paradisíacas de aguas cristalinas, una riquísima gastronomía, sus casitas blancas y azules, pueblecitos con encanto, historia,...es un combo perfecto para tu próximo destino a la vista, recomendable 100%!
